Procedo de Cataluña y después de pensar en lo que significaría construir una Autovía a 100 metros de la Ermita de la Magdalena, he llegado a la conclusión de que es lo mismo que si a los políticos catalanes se les hubiese ocurrido construir una Autovía a 100 m del monasterio de Monserrat. La verdad es que la idea repugna de tal modo a la inteligencia que casi parece mentira que se haya humillado a Castellón hasta el grado de Licitar la Autovía por el Paraje de la Magdalena. Pudiendo hacerse por otros lugares que no afectan al Paraje.

Hay una gran diferencia entre lo que sucedería en Cataluña y lo que está sucediendo en Castellón. En Cataluña a los defensores de esa hipotética barbaridad, se les declararía “personas non gratas” y por supuesto su carrera política habría terminado. En Castellón -sin embargo- ahí siguen los señores Calles, Colomer y el Subdelegado.

Ante una agresión directa al Patrimonio de la Ciudad, la Generalidad Valenciana tiene la obligación de acudir en amparo de Castellón. No sé a que están esperando los señores Alberto Fabra y Ricardo Costa a tramitar la petición de una moción en las Cortes Valencianas.

Si se hubiese tratado de algo relacionado con el Monasterio del Puig ya se habrían celebrado infinidad de mociones. Pues bien, Castellón es una de las 3 capitales de provincia de la Comunidad valenciana y el Gobierno de la Nación está cometiendo con ella una auténtica villanía. Por ello, es esencial que el resto de los valencianos acudan en su ayuda.

Una Declaración Institucional en las Cortes Valencianas sería de una gran ayuda para anular el ya denominado “Trazado de la Vergüenza”.

cites

diccionari

corrector

LINKS

NAVEGA EN
VALENCIA

Entrar com
a usuari